Por Maestro Manuel Delgado / @MtroDelgado
La exigencia reiterada del electorado en las campañas comiciales hechas a los políticos es la de que regresen a sus distritos y secciones una vez que hayan ganado el encargo de representación popular para el que fueron votados, es decir que cumplan con las propuestas de gobierno ofrecidas, y para las que fueron elegidos pero que, además, no se envuelvan en una burbuja de poder, lejanos e inalcanzables.
Este reclamo no es nuevo considerando que se ha hecho una costumbre demagógica y tramposa, el que los aspirantes a los diferentes cargos de elección popular ya no vuelvan a tener contacto directo con los gobernados, sino sólo cuando se actualizan los tiempos electorales.
Un “gobierno cercano a la gente”, es una frase desgastada que han ocupado muchos políticos en sus eslogan propagandísticos pero pocos han cumplido. Y se repite el mismo ofrecimiento de acercamiento al siguiente e inmediato proceso electoral. Por esa razón es qué la ciudadanía padece un hartazgo de mentiras y no cree ya en los actores políticos, quienes buscan todas las formas de conquistar la voluntad del electorado y finalmente incumplen con esta propuesta de estrechamiento entre los mandante y el mandatario, principio constitucional del mandato.
En el caso de la elección municipal se insistió por la ciudadanía a las diferentes propuestas, de los diversos partidos por la para que cumplieran con mantener un contacto real, auténtico y continúo con la sociedad, no solo con apertura en el palacio de gobierno, sino de reencuentro in situ, directo en colonias y comunidades.
En las vísperas me encontré de forma circunstancial, en el primer cuadro de la ciudad, con el presidente del Comité de Participación Ciudadana del Barrio Santiaguito, Juan Antonio Isidro Pantoja Hernández y me comentó que ese precisamente fue uno de los planteamientos qué se hizo a la alcaldesa electa, Lorena Alfaro considerando las diferentes necesidades que tienen los vecinos de la ciudad y de todo el municipio.
Ahora bien, Lorena Alfaro García ha empeñado su palabra de sostener un gobierno cercano a la gente. Ese presupuesto pues, obliga a la nueva administración municipal a marcar la diferencia con el gobierno saliente de Ricardo Ortiz Gutiérrez de atender de forma real y cercana a la ciudadanía, siendo del dominio público que el de Ortiz Gutiérrez se caracterizó por ser un coto de poder que sólo gobernó para las élites y marcó un rechazó total hacia las clases populares.
La alcaldesa electa Lorena Alfaro ya ha mandado el mensaje a través de las redes sociales de que atenderá a un reencuentro directo y cercano, considerando las diferentes opiniones y propuestas de los gobernados de dar solución de manera oportuna las diversas necesidades que existen, tanto en el medio urbano cómo en la zona rural.
Los diferentes grupos sociales, con excepción de aquellos qué son oposición sistemática, confían en que el de Lorena Alfaro sea, en verdad, un gobierno de puertas abiertas y de cercanía con la sociedad.
A razón conocida, no solamente es justo atender a ese compromiso sino que además es necesario, a fin de que el gobierno municipal que encabezará Lorena Alfaro a partir del 10 de octubre próximo para la administración 2021-2024 dé cumplimiento al principio democrático que inmortalizó Abraham Lincoln en su discurso de Gettysburg de que “El gobierno es del pueblo, por el pueblo y para el pueblo”.