Por: Maestro Manuel Delgado / Cadena 8 Noticias
«Ya no se gana con campañas de mero trámite, ya el PAN tiene que ganar con un buen candidato y haciendo una campaña de tierra y el PRI debe de dejar de estar en el confort de administrar sus derrotas y conformarse con tres o cuatro espacios, que ya sabemos quienes son y el PAN tiene que bajarle tres rayitas a la soberbia» : Gerardo Zavala Procell.
La elección municipal en Irapuato, en junio de 2024, será la más competida de los últimos procesos después de 26 años de predominancia panista, con una 4T «in crescendo» y la figura cada vez más fuerte de la aspirante morenista, Irma Leticia González.
Frente a esta condición, el PRI, con su deseable Frente Amplio, sería el fiel de la balanza para que no le arrebatara Morena el poder al PAN y entregara Lorena Alfaro la estafeta en una posible y probable alternancia.
Sin embargo el panismo en Guanajuato no responde a los intereses de una alianza como la que impulsan PAN, PRI y PRD a nivel federal.
En el estado y particularmente en los municipios del corredor industrial, la dirigencia estatal no ve con buenos ojos subir al PRI a la contienda que creen tener en la bolsa.
En Irapuato, el panismo asume que el PRI no le abona y lo ven como un ancestral rival. Sin embargo las encuestas más recientes tanto internas del PAN como externas colocan a este instituto político por debajo en las preferencias electorales.
Con una eventual alianza PAN-PRI se estaría inclinando la balanza para no dejar llegar a Morena, ya que el PRI le sumaría al menos seis mil votos.
La elección en donde más sufragios logró el candidato del PRI a la presidencia municipal, fue en el año 2015 con Gerardo Zavala Procell, perdiendo ante Ricardo Ortiz con una mínima diferencia de casi dos mil votos.
Las condiciones del PAN para esta elección no solamente son de una competencia cerrada, sino incluso enfrentan un riesgo de entregar la plaza.
Bajo esas circunstancia, la necesidad de una alianza PAN-PRI es más urgente para el panismo. Los priistas entonces se convertirían en el fiel de la balanza.
Ante una situación poco probable de este esfuerzo conjunto, entre ambos partidos, Zavala, quien apareció recientemente en la foto con la virtual candidata del PAN a la gubernatura, Libia Dennise García Muñoz Ledo, junto con otros connotados priistas, sería lanzado nuevamente para la elección municipal.
En el 2015 el candidato priista Zavala Procell logró 64 mil votos, contra casi 66 mil de Ricardo Ortiz, es decir el PAN marcó una diferencia de solo tres puntos.
Sin embargo lo que queda del priismo, no está a favor de que el abanderado sea Gerardo Zavala, por lo que una eventual candidatura alterna sería el regidor Luis Felipe Ipiens Humara, figura que actualmente está en los reflectores por ser integrante del Ayuntamiento.
En realidad son pocas las figuras que tiene el priismo para competir en Irapuato, ya que incluso las encuestas colocan a la diputada Yulma Rocha muy atrás con tan solo 11 por ciento contra 30 de Lorena Alfaro y 34 de la también legisladora Irma Leticia González.
Los priistas han volteado la mirada a Gerardo Padilla Fuerte, hijo del ex alcalde Gerardo Padilla Navarro, a quién perfilan como una figura fresca, aunque su trayectoria política está en ciernes.
Un personaje que también se baraja como un posible candidato a la alcaldía es el empresario Fulgencio Hinojosa, propuesta del priismo en 2021 y que declinó para darle el paso a Karen Guerra, quién perdió frente a Lorena Alfaro alcanzando una escasa votación.
El caso de Carlos Abel Lira, presidente del Comité Directivo Municipal del PRI es particularmente interesante ya que pudiera ser el candidato viable para contender por la alcaldía, sin embargo en radio pasillo se comenta que está más interesado en que la candidatura sea para una mujer, lo que le permitiría ir en la primera posición para alcanzar una regiduría.
Habrá pues que esperar a que se defina el género y si va Gerardo Zavala o Luis Felipe Ipiens, estaría Carlos Abel en la lista de los soñadores.