El mensaje es claro por parte del gobernador: no tolerar corrupción de alcaldes salientes. Ricardo Ortiz, de Irapuato, debe de saberlo

Por Fidel Ramírez Guerra / @periodistafrg

La alcaldesa entrante de Irapuato, Lorena Alfaro, ya recibió la línea del gobernador y del secretario de Finanzas: no tolerar corrupción. No solapar y denunciar si es necesario.

En Guanajuato y en León, la consigna es que ya “no más Ricardos” en Irapuato. Se terminan dos administraciones consecutivas del arquitecto Ricardo Ortiz Gutiérrez, con ciertos logros en obra pública, pero con un manejo de recursos que está por verse.

La riqueza personal de Ortiz es inmensa. De estar en la bancarrota a mediados de los 90 hoy es uno de los hombres más acaudalados de la ciudad. A dirigentes del PAN en el estado les sorprende tremendo patrimonio.

Por eso, si una entrega recepción está vigilada y una administración que será revisada con lupa, es la de Irapuato. No habrá tolerancia ni para Ortiz ni para otros alcaldes que hayan metido mano. Se sabe que, entre más obra, más se roba.

 

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