Guanajuato, Gto.- Con la finalidad de guardar en la memoria colectiva la realidad vivida por la pandemia del Covid-19 y la contingencia sanitaria que se ha presentado en los últimos dos años, la Universidad de Guanajuato (UG) creó una cápsula del tiempo que podrá ser abierta hasta el año 2052.
Este dispositivo que fue enterrado en el edificio central de la máxima casa de estudios del Estado de Guanajuato contiene en su interior artículos, en donde se refleja la realidad de los primeros dos años de la pandemia del Covid-19.
Su valor e importancia destaca debido a que la pandemia del nuevo coronavirus es considerada la enfermedad más grave los guanajuatenses han enfrentado en el último siglo.
La ubicación de la cápsula se encuentra en el exterior del patio del Antiguo Colegio Jesuita y en ella se guarda y almacena el recuerdo de lo vivido en estos dos años, con esta patología para que las generaciones futuras se reencuentren con el pasado.
Eloy Juárez Sandoval, titular de infraestructura y servicios universitarios de la UG explicó todo el proceso para adecuar y colocar dentro de este espacio los artículos y la información con relación al Covid-19.
Además de guardar en su interior el listado de las personas que hasta ahora han perdido la vida a causa de la enfermedad, también se encuentran fotografías de los espacios académicos vacíos y cubre bocas que darán testimonio de la forma en como se encaró la pandemia.
Se espera que, con estos elementos, las futuras generaciones de estudiantes y académicos de la UG, así como la población en general cuente con elementos para reflexionar sobre todo lo que generó el padecimiento.
En la cápsula también se colocaron los ejemplares de los periódicos escritos que circulan en el Estado de Guanajuato, con fecha 17 de marzo de 2022, que es la fecha cuando se cumplieron los primeros dos años del decreto de la contingencia sanitaria por la pandemia del Covid-19.
Para proteger, los objetos y materiales que se ubican al interior de la cápsula se protegieron con papel especial y lo que se conoce como “cápsula primaria” fue cerrada con gas nitrógeno para eliminar el oxígeno y evitar los riesgos que genera la propia humedad del ambiente.
José de Jesús Galván, académico de la UG que colaboró en la creación de este aparato señaló que, en un plazo de 30 años, cuando se pueda abrirlo, esas generaciones de hombres y mujeres podrán conocer a detalle lo que paso en su ciudad por la pandemia del nuevo coronavirus.
En la ceremonia donde se llevó a cabo la presentación y posterior entierro de la cápsula estuvieron presentes autoridades universitarias, alumnos y público en general.