La bicicleta se ha convertido en un medio de transporte económico y ecológico, ahora se pretende que sea una herramienta para fomentar la participación ciudadana y el desarrollo ya que puede facilitar el acceso a la educación, la atención sanitaria y el deporte. Es por eso que este medio de transporte se ha convertido en una prioridad para muchas de las grandes ciudades del mundo cómo París, Berlín y Nueva York.
En París buscan convertirse en una capital 100% adaptada a la bicicleta, para ello se invertirán 250 millones de euros en la construcción de carriles para bici o ciclovías, plazas de aparcamiento y se limitará el tráfico en el centro de la ciudad, así anunció el Ayuntamiento de esa ciudad en el mes de octubre de este año (2021).
Del total de la inversión, 180 millones se aplicarán en la construcción y mejora de infraestructuras y aparcamiento de bicicletas con la creación de unas 50,000 plazas en la calle y otras tantas en espacios privados; 40 millones a programas de educación vial de menores y asociaciones; y el resto irá dirigido a la reforma de zonas de tráfico limitadas a otros vehículos.
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Actualmente la ciudad registra casi 1 millón de viajes en bicicleta diarios, lo que puede llegar a ser preocupante debido a la falta de infraestructura ya que, aunque existen vías para ciclistas y lugares de estacionamiento, pero no son suficientes para cubrir la demanda.
Será un trabajo de 5 años
El aumento de ciclistas en el mundo y específicamente en la ciudad de París inspiró el proyecto “Bike Plan” el cuál se planea tarde 5 años en llegar a su meta.
Se planea que para el 2026, la ciudad habrá ampliado las rutas especiales para ciclistas y agregado 180 kilómetros de nuevas ciclovías permanentes. Los ciclistas también tendrán más del triple de espacios de estacionamiento, alcanzando un aproximado de 180.000 lugares en lugar de los 60.000 existentes. La ciudad también planea crear nuevas “rutas reales” para facilitar las rutas para un mayor número de bicicletas. Además de estas rutas en las grandes avenidas, se planea aumentar el número de calles para bicicletas de baja velocidad y rediseñar las principales intersecciones para garantizar la seguridad de los ciclistas.
Además, buscan mejorar la infraestructura alrededor de los principales puntos de conexión entre los suburbios vecinos y la ciudad para crear una mejor integración en el área metropolitana más amplia.
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Se preocupan por el medio ambiente
Una de las principales razones por las que el uso de bicicletas ha aumentado es la crisis climática que se vive en la actualidad, siendo el uso de las bicicletas uno de los factores más importantes en el cuidado del medio ambiente.
Ante ello, la alcaldesa de París, Anne Hidalgo, anunció en mayo del año 2020, una serie de planes que fomentan el uso de ciclovías y pistas para autobuses generando más espacios para peatones y ciclistas en toda la ciudad. Estos planes son específicos para reducir el número de automóviles en la ciudad, siguiendo el ejemplo de los planes anticontaminación y anti congestión que fueron introducidos durante el período de confinamiento por la pandemia del Covid-19.
Otras ciudades que implementan el uso de la bicicleta
Una de ellas es Ámsterdam, la Capital de los Países Bajos, es considerada como una de las ciudades más amigables con las bicicletas del mundo. Esta ciudad ha construido infraestructura para bicicletas dentro de su tejido urbano desde hace muchos años y en 2019, la ciudad lanzó un nuevo plan para 2022 que se enfoca completamente en mejorar los estacionamientos de bicicletas y la infraestructura existente.
Otra ciudad que se ha esforzado en apoyar a los ciclistas es Berlín que, aunque no ocupa un lugar destacado en la lista europea de ciudades favorables para bicicletas, actualmente se encuentra trabajando en un nuevo plan de “superautopistas” para bicicletas.
Fuentes AD Magazine, Forbes, ArchDaily.
