Por Fidel Ramírez Guerra / periodistafrg
El PAN en Guanajuato se prepara para los próximos tres años. Para la “madre de todas las batallas”. En el 18 y en el 21 no le cedió grandes espacios a Morena. Y de manera reciente también quedó demostrado que trae al PRI, a la cúpula en mando.
Los ex gobernadores siguen activos en mayor o menor medida. Fox, vigente en redes. Márquez, haciendo grupos. Oliva, con actores claves y desde luego Juan Carlos Romero Hicks, el más activo. Y un Carlos Medina que golpea para hacer negocios.
En el tiempo el PAN y todos los partidos sufren escisiones, bajas. Los hombres pasan y las instituciones se quedan. El poder no es para siempre. Plutarco Elías Calles siguió influyendo después de su mandato.
Salinas es otro ejemplo de políticos influyentes después de su gobierno.
En Guanajuato los panistas están entrando a los consensos entre los principales actores y sus grupos, con una mayor actuación de las nuevas generaciones. Es imposible que las dirigencias se mantengan en unas manos tanto tiempo.
El panismo no tiene otra sino ir a los consensos. Ni todo para un solo grupo ni nada para nadie. Y es lo que se ve. Al final Oliva, Torres Graciano, Márquez, Romero, irán cerrando por la unidad.
