Columna/La de Ocho
Por: Maestro Manuel Delgado / @MtroDelgado
Por fin se va, parecía eterna la pesadilla. Los irapuatenses, con ábaco destartalado, cuentan ansiosos los días y las horas interminables, de aquí hasta el día 9 de octubre a las 23:59:59 horas, hasta el último segundo.
Tres ejercicios de gobierno municipal, uno diferido y dos continuos, fueron el hartazgo hasta la emesis y la constante angustia. Y del “hombre del millón”, que aparentaba ser impoluto, incorruptible siempre trajeado, pasó a ser el obvio “corrupto de los mil millones”, dueño de franquicias de Oxxo, gasolineras, hoteles y otras joyitas en el armario, amén de sus secretas alianzas oscuras.
Políticos, propios y extraños le han cuestionado sus arcas personales, amasadas por manejos oscuros, en algunos casos, y descarados de corrupción y chantaje en otros.
Hace 30 años, el hombre de lamentable figura era un bisoño sujeto que iba a menos en la escalada social y estaba por perder su patrimonio, su casa, una vivienda nada ostentosa que debía a la banca, cuando muchos mexicanos perdieron sus bienes raíces por el llamado error de diciembre que dio pauta al movimiento Salvemos Nuestra Casa, fundado en el estado en el año de 1995 por el panista Beto Cifuentes Negrete, dirigente de la organización que agrupaba a familias con problemas de créditos hipotecarios.
Hoy este personaje de marras se da el lujo de tener helicóptero privado, yates y una fortuna en bancos del extranjero amasada al amparo del ejercicio del poder deshonesto.
Para nadie en el pueblo es desconocido y es un asunto del dominio público su enriquecimiento inexplicable (o mejor dicho muy explicable) y que el político de idas represivas y dictatoriales creció en el ajedrez político de Guanajuato y del país solapado por otros personajes de su mismo cariz.
Es tan claro su enriquecimiento ilícito y su descarada autoasignación de obra inflada, cobro de moches y otras linduras que, ni necesidad hay de mencionarlo de manera nominativa. Hay tema para la Unidad de Inteligencia Financiera y oportunidad de investigación del caza-corruptos, Santiago Nieto Castillo.
