Ricardo Anaya estaba muerto y a punto de ser enterrado. Su fracaso en la elección presidencial del 18 y su pasado como un político oportunista lo tenían fuera de la jugada.

Este año tuve intentos de penetrar con recorridos en el país y subiendo discurso y videos, pero permaneció estancado hasta que AMLO lo persigue y le da un empujón. Hoy Anaya acapara la atención como el principal oponente a la 4T

Este jueves Anaya tiene un citatorio en el Reclusorio Norte, de la Ciudad de México. No se va a presentar. Diputados afines se plantaron ayer en las oficinas de la Fiscalía General de la República para exigir la carpeta de investigación. No se las dieron. Tampoco al abogado de Anaya. Ayer mismo la FGR subió un comunicado de prensa mientras que el acusado se sigue defendiendo en sus redes sociales.

Conclusión: si la oposición en México no encontraba un líder, AMLO lo designó y lo está haciendo crecer y si el fIscal Alejandro Gertz Manero NO reúne las pruebas suficientes y Anaya queda libre se le habrá dado la mejor de las condiciones para iniciar la carrera por la presidencia de la república por cualquier partido. Es temprano para visualizar si es por la alianza PRIAN, pero de que en este escenario terminará fuerte, no cabe duda.

Faltan tres años para la elección del 24 y millones de los que hoy son adolescentes en esa fecha podrán votar y es precisamente el segmento de jóvenes donde Anaya está penetrando. Por lo demás Ricardo tiene 44 años de edad y tiene mucho por delante.

En los niveles de Palacio Nacional es de suponerse que si arman algo lo arman bien. Y si no hay solidez en las pruebas contra Ricardo Anaya y este queda libre de toda culpa pasará de víctima a verdugo de AMLO y de la 4T. Por el contrario, si se le prueban dichos y va a prisión, será un gran triunfo de López Obrador contra la corrupción y cualquiera de sus candidatos tendrá el camino libre para el 24.

Dejar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Scroll to Top