Por Fidel Ramírez Guerra / @periodistafrg
Así como la cámara de diputados federal pinta para acuerdos y consensos, en el Congreso de Guanajuato la orientación será la misma…
… aunque en lo local entre los mismos diputados panistas.
La llegada de Luis Ernesto Ayala como diputado estrella y con vías de ser coordinador de la fracción azul provoca reacciones entre Miguel Salim y un buen número de legisladores … ¡y hasta funcionarios!
(Y conste que Salim no está solo: él y Libia Dennise, titular de la Segob, han fortalecido sus relaciones políticas… Hay que sumar aquí que en medios y círculo rojo se enaltece la labor de ella como secretaria frente al papel de bajo perfil de él)
Ayala pretende llegar con un fuerte liderazgo y como antesala para ser el candidato a la gubernatura en el 24 y, precisamente, Libia está en la misma ruta.
Es decir, a tres años del gobierno de Diego ya se están definiendo los grupos:
Luis Ernesto Ayala es uno, y el de Libia – Salim es otro y la arena del Congreso será motivo de lucha entre los azules.
Hay que agregar aquí el posible papel que tenga Aldo Márquez, quien pudiera llegar a la dirigencia del PAN y a la vez ser diputado… factor de equilibrio)
(Se puede, siempre y cuando renuncie a uno de los dos suelos)
El escenario entre la fracción azul es que habrá duros contra duros.
Por lo pronto el diputado Ayala ya quiere llegar con un grupo para reemplazar a otro y en su lista está Comunicación Social, Secretaría General, Finanzas y otras posiciones.
Es decir, Ayala pretende despedir a funcionarios que tienen la relación con Miguel Márquez, con Diego Sinhue y con Miguel Salim.
En la nueva legislatura el enemigo no estará afuera: estará adentro.