A 30 años de la concertacesión privó el silencio de panistas y de priistas. A los primeros no les late fomentar la difusión de su llegada al poder en Guanajuato (un regalo de Salinas) y a los segundos les avergüenza pasar como víctimas y no lograr recuperarse e ir de menos a menos, con un PRI secuestrado por grupos en el tiempo, perdiendo cada vez más a sus bases
“El PRI debió de fijar una posición, pero más allá, esta fecha es oportuna para un recuento de dónde viene el PRI en Guanajuato, dónde estamos y qué viene”, me dice Javier Aguirre Vizuett