Batalla de Aculco

El 7 de noviembre de 1810, los insurgentes fueron atacados en Aculco por los realistas comandados por Félix María Calleja. El Ejército Insurgente tuvo su primera derrota.

Ante esto los insurrectos se dividieron en dos contingentes: una parte partió con el cura Hidalgo hacia Valladolid (hoy Morelia) e Ignacio Allende, con rumbo a Guanajuato.

Aquí dio muestras de una actividad extraordinaria para poner la ciudad en estado de defensa, porque calculaba, con fundamento, que no tardaría Calleja en irlo a atacar.

En este mismo mes de noviembre el brigadier Félix María Calleja recuperó Guanajuato y Allende debió abandonarla.

Hidalgo llegó tres días después de la derrota de Aculco a Valladolid. Aquí permaneció varios días levantando fuerza, pues pensaba hacerse fuerte, y al tener noticia de la ocupación de la Nueva Galicia (hoy Guadalajara) por Torres, salió inmediatamente y llegó a esta población el 26 noviembre de 1810.

Allí se le reunió Allende, derrotado en Guanajuato, y los demás generales, y todos aceptando olvidar sus pasadas discordias, trataron de sacar de la plaza los recursos necesarios, y de organizar un gobierno, a iniciativa de Don Ignacio Rayón.

Con información de Grupo Editorial Centenarios – Kiosco de la Historia. 

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