Guanajuato, Gto.- Integrantes de la agrupación “Guardianes del Camino Antiguo a Marfil” advirtieron que el riesgo de derrumbes y deslaves en la zona sigue vigente, en especial si las lluvias se mantienen y aumenta el caudal del Río Guanajuato.
Hasta ahora, el tramo más afectado es el que se ubica en la zona aledaña de la Hacienda de la Trinidad, donde varias rocas de gran tamaño se han desprendido de su lugar y de paso dañaron el muro que permitía la división con el cauce del citado río.
Karla Piñón, una de las integrantes de los Guardianes recomendó a la población no acercarse a esta zona, debido a que está sólo protegida por gaviones, hechos a base de piedra, que de un momento a otro puede ceder y caer.
Señaló que, en esta parte del Camino Antiguo a Marfil, la humedad generada por las lluvias, lo afecta el piso de las paredes que separan al sendero de la carretera conocida como las “curvas peligrosas”.
“El llamado es la gente para que no acuda por ahora al lugar porque hay mucha humedad y si sigue la lluvia, el caudal del río va a aumentar en cualquier momento y se puede haber más deslaves”, dijo.
La noche del pasado jueves, una fuerte tormenta que se abatió sobre la ciudad ocasionó que el cauce del Río Guanajuato aumentará y en la zona cercana a la Hacienda de la Trinidad, una parte del muro de roca se vino abajo.
Al caer esa parte de la barda, también se bloqueó el camino que conduce a la zona de Noria Alta, por lo que las autoridades municipales intervinieron y la Dirección de Protección Civil (PC) cerró el lugar al paso de las personas.
La integrante de los Guardianes llamó a la población a atender las recomendaciones que hagan ellos, así como las autoridades para evitar que en el lugar se llegue a presentar algún accidente.
“Todavía toda la zona está muy húmeda, de hecho, todo el camino está en esas condiciones, por eso lo mejor es no acercarse y estar al tanto de cuando se podría remediar la situación”, afirmó.
Con una extensión de más de 1 kilómetro, el Camino Antiguo a Marfil es un sendero que cientos de personas que habitan en zonas como Marfil y Noria Alta, así como otras partes de la ciudad utilizan para labores de esparcimiento y recreación.
Esta es la primera ocasión en lo que va de la actual temporada de lluvias, que los deslaves ocasionados propician que la gente no pueda recorrerlo, debido a los riesgos que implican las mismas condiciones del terreno.
El camino corre de manera paralela al cauce del Río Guanajuato, que debido a las recientes lluvias de la temporada contiene un caudal que lo ha hecho crecer y ampliarse a zonas donde hay riesgo de deslaves.
