Ethos Político. Morenistas en lucha de barro

Por: Héctor Andrade Chacón / @hectorandrade70

En Guanajuato Capital, como en León, los morenistas de cepa, esos que comenzaron hace más de una década el apoyo al movimiento de Andrés López Obrador que rompía con el PRD y que logró en 2018 vencer en las urnas con una aplanadora que prácticamente desapareció a la oposición en el Congreso de la Unión y hasta hoy les ha arrebatado más de 20 estados, están que no se la creen al ver las nominaciones que su dirigencia nacional hizo para llevar la bandera rojo marrón en las elecciones municipales, “arribistas” es lo menos que espetan cuando tocan el tema, de paso, ya especulan dejar pasar las campañas con brazos cruzados, a lo sumo votarán por Claudia Sheinbaum y Alma Alcaraz, que de alguna forma les ha convencido durante estos últimos años en la dirigencia del partido, primero, y luego en el Congreso del Estado.

En el caso de León, ya anticipan el desplazamiento que se les hará en todo lo referente al desarrollo de la campaña con los expriistas que han acompañado por años a Bárbara Botello y tampoco les hace ilusión que, de hipotéticamente ganar la elección la abogada, se les de entrada en el Gobierno Municipal, sino es a cargos muy menores, tal y como lo hizo Botello Santibáñez cuando los priistas le llevaron a la victoria en 2012 y acabaron la mayoría desplazados por los “amigos” de la ahora aspirante morenista, de la cual, dicho sea de paso, le cuestionan su desapego a la austeridad republicana obradorista.

Peor están en Guanajuato Capital, donde les ha parecido inconcebible a muchos morenistas que sea Jorge Antonio Rodríguez Medrano, el concesionario de TV8, con negros antecedentes legales y hasta una demanda (llevada por mucho tiempo) por no reconocer paternidad y por ende incumplir entrega de alimentos a un menor; algo que es contrario a lo que públicamente Morena ha pugnado como una acción inaceptable.

Pero más les ha parecido inconcebible el silencio, ahora sí, “como momia” (AMLO dixit), de Paloma Robles Lacayo, la regidora morenista que en sus redes sociales de forma constante se señalaba como la mejor posicionada en el conocimiento y apoyo ciudadano y que ha mostrado una postura contraria a las “transas” y a quien nadita le cae bien el concesionario de TV de cable, por la forma en que la violentó siendo ella directora del Museo de las Momias, en la administración de Édgar Castro, cuando la acusaron de manejar indebidamente la taquilla o la inversión de más de tres millones de pesos que se hicieron en ese gobierno para mejorar las condiciones del museo, chocando con los comerciantes locales, que le rayaron su carro, y de los cuales luego se hizo aliada cuando se propuso un nuevo Museo. Paloma Robles sigue callada, se especula, esperando que le toque algo en el reparto, “disciplinándose”, ahora sí, a lo que digan las autoridades de su partido, aunque pasen por encima de sus aspiraciones y los sueños de sus seguidores; se afirma que esperaría como recompensa ser candidata a una diputación; sin embargo, se preguntan si habrá dejado entonces a un lado sus principios o sólo los cambiará por otros.

En el bunker de Roberto Loya, se sabe, tampoco están conformes, y también se mantiene el silencio. Ya lo bajaron en 2021 y ahora siguen insistiendo que las cosas pueden cambiar todavía. Mantiene su vela pues, pero se mantienen en la esfera de la negociación.

En todo caso, se sabe que el enjuague de Jorge Rodríguez Medrano fue cocinado en México, con varios aliados, algunos de ellos plenos “enemigos” de Ricardo Sheffield, auspiciados por el exsecretario de Gobernación, Adán Augusto López, el mismo que trató de “echarlo” de Profeco, pero topó con pared. En le tejido de esta candidatura, estaría metido también un adepto de Marcelo Ebrard, el diputado Emmanuel Reyes, que ha hecho su carrera bajo la fronda de la Iglesia de la Luz del Mundo, la misma de Naasón Joaquín, el patriarca que está sujeto a procesos penales en Estados Unidos por abuso sexual sobre menores. El operador de Adán Augusto se sabe ampliamente, es Miguel Ángel Chico Herrera, quien también tiene intereses mobiliarios en Guanajuato Capital, y aliado de Ernesto Prieto Ortega, que tras la derrota que le propinó Ricardo Sheffield anda tratando de quitarle posiciones donde se pueda y por ello también estaría detrás de la candidatura de Medrano.

Ahora bien, estos apoyos no son nada gratuitos. Los articuladores de la candidatura de Jorge Rodríguez Medrano ya le estarían haciendo la lista de su planilla para el Ayuntamiento. Se asegura entre los morenistas que los padrinos políticos del concesionario de TV8, quieren que Mausita Rodríguez Nieto, esposa de Miguel Ángel Chico, una respetable dama guanajuatense muy distante a la fama del candidato rojo marrón, vaya en la primera posición de dicha lista; luego, estaría el polémico abogado (acusado de falsificación de firmas) Oscar Aguayo; detrás de él, estaría la posición destinada para que el secretario general del partido en el estado, Jesús Ramírez Garibay, coloque a alguien de su muy íntima cercanía, garantizando así el registro sin sobresaltos de la planilla ante el IEEG; y en la cuarta posición, Julio César García, si, el experredista ligado al finado Hugo Estefanía, hoy protegido de Emmanuel Reyes, que fue separado del Ayuntamiento 2015-2018 en Cuévano, por violencia de género (se le acusó de golpear a su mujer).

Vaya Cabildo futuro estaría entregando Morena a los guanajuatenses. Sin embargo, esta historia está lejos de considerarse terminada.

Tomada de Paralelo X.

Fotografía de Paralelo X.

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