Por: Héctor Andrade Chacón / @hectorandrade70
El año 2024 se presenta como una oportunidad para consolidar la recuperación del sector turístico en el estado de Guanajuato. Antes de la llegada de la pandemia de COVID-19 la entidad se había colocado como uno de los destinos interiores de México más atractivos para el turismo internacional y nacional. Las restricciones de movilidad indudablemente golpearon al sector y fue, a partir de 2021, donde en los municipios y desde el Gobierno del Estado, se trazaron rutas para recuperarse lo perdido; ahora, tras tres años de esfuerzo los principales destinos del estado, Guanajuato Capital y San Miguel de Allende, ya dan cifras superiores o similares a 2019, es decir, ya se logró revertir la caída que generó la pandemia en los resultados anuales; sin embargo, también hay que referir que estos datos aún faltan ser contextualizados respecto al aumento de la inflación y otros factores para dimensionar qué tanto la economía del turismo ya está en condiciones óptimas.
En el orden nacional, el día de ayer la Secretaría de Turismo nacional, a cargo de Miguel Torruco, dio a conocer que el sector turístico nacional “ha cerrado el año con las mejores cifras de la historia: más de 40 millones de visitantes extranjeros, con un gasto medio de más de mil 155 dólares (20 mil 700 pesos), lo que representa una mejora significativa, de más de un 25,7 por ciento, con respecto al año 2019, que fue el último ejercicio regular antes de la pandemia de COVID-19, que provocó una fractura en el turismo mundial, incluido México”, de acuerdo con lo señalado en el informe.
Cabe recordar que hace unos días el titular de SECTUR estuvo en Guanajuato Capital para otorgar el reconocimiento como Barrio Mágico a Mineral de la Luz y ratificar nombramientos de pueblos mágicos a Dolores Hidalgo, Mineral de Pozos, Jalpa de Cánovas, Salvatierra, Yuriria y Comonfort, acompañado por el gobernador Diego Sinhue Rodríguez.
De ser así, será importante saber los datos que debe tener en sus manos el secretario de Turismo estatal, Juan José Álvarez Brunel, para saber qué parte de la tajada de éxito nacional del turismo le correspondió a Guanajuato.
En San Miguel de Allende, municipio que destacó por tomar medidas de profesionalización del servicio turístico desde la propia pandemia y que ha consolidado su promoción internacional y nacional bajo la administración de Mauricio Trejo Pureco, los resultados apuntan a que se ha tenido en 2023 un excelente año en cuanto a visitas e ingresos.
El año pasado, de acuerdo con los datos municipales, se logró recibir a 2 millones 55 mil 981 visitantes, cifra superior al millón 864 mil 771 de turistas atendidos en 2022. Esto derivó en una derrama económica de 6 mil 823 millones 175 mil 919 pesos, una cifra récord. En 2022 los datos apuntan a que la derrama fue en el orden de los 5 mil millones de pesos.
Es decir, no solamente aumentó el flujo de visitantes, sino que también se logró que estos se quedaran más tiempo en la ciudad y también dejaran más dinero a los diferentes prestadores de servicios, lo cual ha dinamizado la economía de San Miguel de Allende con mucha mayor fuerza. De igual forma, debe acentuarse que el turismo de negocios ha comenzado a descollar como respuesta a las políticas de Mauricio Trejo, que no sólo ha atraído convenciones diversas del ámbito empresarial, sino que ha impulsado el arribo del World Trade Center a la ciudad patrimonio de la humanidad, lo que ya viene fungiendo como un gancho para visitantes extranjeros, mientras el proyecto avanza.
En Guanajuato Capital, también hay cifras halagüeñas, que poco a poco van integrándose para dar una radiografía mucho más completa de lo sucedido en 2023. El gobierno de Alejandro Navarro Saldaña, por ejemplo, ha dado a conocer los buenos resultados de lo recabado en el Museo de las Momias, uno de los indicadores de repunte o descenso (se observó igualmente entre 2019 y 2022), citándose que el año pasado fue posible recaudar para las arcas municipales 42 millones 286 mil 857 pesos, gracias a la visita de 547 mil 502 personas.
Las cifras son mejores que en 2022, que se recaudaron 40 millones 20 mil pesos con 543 mil 655 visitantes. Sin embargo, aunque consistente el aumento de visitantes a partir del impacto de la pandemia, pareciera no ser mucho respecto al 2022 para lo que es la segunda fuente de ingresos del municipio después del impuesto predial y que respalda en mucho el financiamiento para la prestación de servicios municipales.
El tema merece análisis en la ciudad capital y decisiones que superen los embates de una minoría nostálgica que no quiere mover un ápice lo que hay o se hace en Cuévano. Llegará el momento que las dimensiones del Museo de las Momias no permitan recibir ni una mayor cantidad de visitantes, ni ofrecer condiciones de atención adecuadas para quienes ahí llegan.
La idea de un nuevo Museo de las Momias deberá ser planteada nuevamente, tarde que temprano, desde la autoridad municipal, pero esta vez con argumentos mucho más sólidos que hace meses para superar las trampas de la oposición política o la visión rancia de quienes se creen el “intelecto” de la urbe, la cual, por cierto, se va convirtiendo en un sitio de fachadas, pues sus interiores no pueden ser reparados bajo los patrones que impone el Instituto Nacional de Antropología e Historia para su conservación, por el alto costo, lo que lleva que al paso de los años haya derrumbes en el Centro Histórico, mientras que se anquilosa también la oferta que debiera tener una ciudad viva para sus habitantes y visitantes. No se trata de destruir lo que hay, sino dejar de lado la mentalidad mediocre de una burocracia conservacionista a la cual le resulta mucho más complejo imaginar cómo avanzar manteniendo el patrimonio.
Por otro lado, Guanajuato debe explorar nuevas formas de atracción turística. El Festival de la Muerte ha sido un verdadero éxito y eso es logro de la actual administración de Alejandro Navarro, pero deberá darse un nuevo paso al frente. Inclusive la teatralidad dada al evento por el alcalde y su esposa, Samantha Smith, resultan un eco nacional e internacional que lanza luz al festival y genera interés.
La cultura de la muerte en México es de alto atractivo internacional y hasta la escenografía citadina, representada en películas como Coco que ha generado interés en países como China, alimentando el deseo de visitar Guanajuato entre sus turistas, debe emplearse a fondo para no sólo convertirse en mero mercantilismo, sino ampliarse a un turismo cultural de alto impacto.
Asociar el Museo de las Momias, con todo lo que gira a la muerte en México, puede ser un plus que de hálito a la economía capitalina. Por ejemplo, aunque hoy aislado, el esfuerzo de Cristian Cantero, por imaginar, sin más base que el uso de la inteligencia artificial y su creatividad alimentada con algunos datos de los personajes, cómo pudieron ser en vida quienes hoy se exponen en el Museo de las Momias, resulta un nuevo atractivo de la ciudad.
La exposición que será inaugurada este martes al mediodía en la capital del estado con estas representaciones, son un ejemplo de cómo puede potencializarse con base en las nuevas herramientas tecnológicas, la apreciación de uno de los principales atractivos de la capital.
El alcalde Alejandro Navarro Saldaña, que hoy estará en la apertura de la exposición, bien puede encontrar inspiración para replantear este salto, entre muchos otros, para ampliar los atractivos de la primera ciudad patrimonio de la humanidad en Guanajuato. Ayer, estuvo como peregrino en San Juan de los Lagos, un enclave que ha sabido monetizarse con base en la fe, en un paraje propio de Pedro Páramo. Guanajuato Capital que tiene mucho más y que desde Alexander von Humboldt alcanzó una fama mundial por su riqueza proveniente de la minería, tiene muchas vetas para diversificar sus atractivos o llevar a nuevas alturas los viejos, como es el caso del Museo de las Momias, con ideas que superen al conservadurismo rancio o misticismo de personajes que en realidad sólo querían ser candidatos.
Tomada de Paralelo X. El Diario político de Guanajuato.