Sacrificio de los Hermanos Serdán. 18 de noviembre de 1910

Francisco I. Madero convocó a la insurrección armada para el 20 de noviembre de 1910, desde su exilio en San Antonio, Texas. Supuso que habría levantamientos en todo el país, pero los enfrentamientos se dieron en forma aislada en distintos poblados, excepto en Chihuahua. En Puebla, la anticipación de la policía a los hechos derivó en la refriega del 18 de noviembre de 1910, que terminaría con la aprehensión de las mujeres Serdán, la muerte de Aquiles y su hermano Máximo.

En vísperas de la Revolución Mexicana, la familia Serdán de Puebla, Pue., participó activamente en labores de propaganda política, en apoyo del candidato antirreleccionista don Francisco I. Madero. Después del fraude electoral de 1910, decidieron unirse a la revolución, que fue convocada por medio del Plan de San Luis.

La policía de la ciudad de Puebla, se enteró que existía un arsenal clandestino en el domicilio ubicado en la antigua calle de Santa Clara No. 4, casa de la familia Serdán. De inmediato se rodeó el domicilio, y se conminó a los ocupantes a rendirse y a entregarse a las autoridades. Sin embargo, los hermanos Aquiles, Máximo y Carmen Serdán, acompañados de una docena de seguidores, decidieron oponerse a las autoridades y resistieron con las armas en la mano.

Varias horas duró el tiroteo. Las autoridades enviaron a 400 soldados del Ejército Federal y a 100 policías, para aprehenderlos, pero la resistencia de los hermanos Serdán fue más de la esperada. Finalmente, la casa fue ocupada por las autoridades. Carmen, su mamá y la esposa de su hermano Aquiles, fueron remitidas a la cárcel; Máximo, junto con otros compañeros, murieron en la refriega, y Aquiles, un día después (el 19 de noviembre de 1910), fue encontrado y asesinado.

La primera sangre por la causa de la Revolución Mexicana ya se había derramado. El sacrificio de la familia Serdán no fue en vano. Su ejemplo sirvió para motivar, a los que aún tenían dudas de participar, en el movimiento armado regenerador que se avecinaba, y se decidieran a participar, con el anhelo de alcanzar un México mejor.

Más sobre los hermanos:

Aquiles Serdán, el menor de tres hermanos, fue uno de los hombres con espíritu antirreeleccionista que apoyó, desde el inicio, a Francisco I. Madero; en Puebla, Serdán fundó el club político: Luz y Progreso el que editó el semanario La No Reelección y cuyo tiraje fue muy corto debido a la falta de fondos de los miembros del club.

Máximo Serdán, hermano menor, fue de los primeros revolucionarios que lucharon en una notoria desventaja contra los casi mil soldados que el gobernador envió para terminar con los rebeldes.

Carmen Serdán, hermana mayor de Aquiles, fue de las pocas sobrevivientes de ese conflicto; ella subió armada al techo de su casa para incitar a los vecinos a unirse a la lucha, fue herida por una bala y, después del enfrentamiento, encarcelada junto con su madre en la cárcel de la Merced.

Fuente Archivo Histórico 2010, Relatos e historias de México, Casa Don Pascual.

Notas relacionadas:

María del Carmen Serdán Alatriste

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