Por Fidel Ramírez Guerra / @periodistafrg
Alejandra Gutiérrez fue apoyada por Ricardo Alaniz; Carlos García por Ricardo García y Lorena Alfaro por Eduardo Ordoñez.
Cada caso es distinto, pero están las manos de los señores empresarios que influyeron para sus triunfos ya sea en mayor o menor medida.
En León Alaniz trae una notable influencia sobre la candidata electa y sobre el esposo de ella, Eduardo Ramírez, quien trabajó con él.
Caso similar en Silao, entre García Oseguera y Carlitos. La influencia es notable.
Irapuato es distinto: el empresario Ordoñez jugó desde un principio de manera abierta en la elección, atrajo grupos, la atención de medios y al final brindó su apoyo a Lorena. Esto, sin duda, le generó al PAN una mayor votación.
Los tres casos son material de observación durante la transición y en los ejercicios de gobierno.
Alaniz querrá proyectar a su hijo.
García Oseguera le abrirá las puertas a Carlos en la Ciudad de México ante el gobierno federal.
Y Eduardo Ordoñez tiene una orientación de que esfuerzos del próximo gobierno se canalicen al campo.